El preparador físico Juan Ramírez criticó con fuerza a la concesionaria Blanco y Negro tras frustrarse la posibilidad de integrar el nuevo cuerpo técnico interino liderado por Héctor “Tito” Tapia. Lo que ya estaba encaminado cambió abruptamente cuando la dirigencia decidió apostar por Hugo González y Luis Pérez en su lugar.

El descontento de Juan Ramírez
Ramírez, quien se había preparado para asumir el cargo y había sido informado tras una reunión entre Aníbal Mosa y Tapia, expresó:
- Estaba listo para trabajar durante los tres partidos de interinato y fue avisado formalmente para asumir esas funciones.
- Aclaró que sus vínculos profesionales con jugadores como Arturo Vidal, Lucas Cepeda y el “Tucu” Contreras no interfieren con su desempeño. “Es una relación profesional, no algo más,” afirmó.
- Cuestionó la falta de consideración de la dirigencia: “Me parece que es una falta de cariño hacia el club… Ante todo, soy un profesional.”
- Subrayó sus méritos históricos, recordando que fue el primer jefe del área física del fútbol joven de Colo-Colo en 2005, un rol relevante junto a figuras como Mirko Jozic y Leonardo Véliz.
- Añadió que sentirse tachado por su cercanía con Vidal fue un insulto a su trayectoria. “Esto es una falta de respeto a mi carrera,” remató, comparándose con otros técnicos que integran en su equipo a familiares si lo desean, como Diego Simeone.

Contexto institucional
- La salida de Jorge Almirón había dejado vacante la banca presidencial, y todo parecía indicar que Tapia sería el encargado. Su plan incluía contar con el apoyo de Ramírez en el cuerpo técnico.
- Sin embargo, Blanco y Negro desestimó esa propuesta. Esto generó malestar por cómo se manejó el proceso y por la falta de explicaciones claras desde la dirigencia.
- Finalmente, la dupla técnica de Hugo González y Luis Pérez fue la elegida, dejando al margen al equipo que Tapia había configurado de antemano.

