El pasado domingo 23 de julio, el Gimnasio Municipal de La Florida fue testigo de un emocionante Superclásico chileno en la modalidad del Futsal, donde Colo Colo y Universidad de Chile se enfrentaron por la fecha 3 de la liguilla por el título nacional. Los albos se llevaron la victoria con un marcador de 3-1, pero lamentablemente, el resultado del partido quedó empañado por un hecho delictual ocurrido tras el encuentro.
Una vez finalizada la disputa en la cancha, los ánimos no se calmaron fuera del recinto. Según informó el sitio Sentimiento Popular, el encargado de portar el corpóreo del CSD Colo Colo, popularmente conocido como el «Gato Colo Colo», fue víctima de un asalto perpetrado por hinchas de Universidad de Chile en las inmediaciones del gimnasio.
El robo no solo implicó la pérdida del objeto en sí, sino que afectó a uno de los símbolos más representativos del Club Social y Deportivo Colo Colo, ya que el corpóreo es utilizado para animar y alentar a las diferentes ramas deportivas de la institución. Afortunadamente, el encargado del disfraz no sufrió daños físicos y se encuentra en buen estado.
El hecho causó indignación y preocupación en el ámbito deportivo, especialmente en el fútbol chileno, que lamentablemente ha estado marcado por episodios de violencia protagonizados por barras bravas. En esta ocasión, una fanpage de Los de Abajo en Facebook se atribuyó la responsabilidad del robo y publicó mensajes de alarde y celebración sobre el acto delictual.
Este lamentable episodio vuelve a poner en tela de juicio la seguridad y el ambiente en eventos deportivos, y pone de manifiesto la necesidad de tomar medidas para evitar que la violencia se apodere de nuestro balompié. Es fundamental que los clubes y las autoridades trabajen en conjunto para garantizar la integridad de los asistentes y la paz en el deporte, para que los aficionados puedan disfrutar de la pasión del fútbol sin verse afectados por situaciones violentas.