El estadio Monumental fue testigo de una jugada que mantuvo a los hinchas de Colo Colo en vilo durante el Superclásico, donde lamentablemente perdieron 1-0 ante Universidad de Chile. La polémica se desató en el segundo tiempo cuando un gol de empate fue anulado por el árbitro José Cabero, generando desconcierto en la afición alba.
La jugada en cuestión ocurrió durante un córner ejecutado por Carlos Palacios, donde Falcón y Zaldivia se elevaron para cabecear. Gabriel Castellón, portero de Universidad de Chile, realizó una destacada intervención en la línea de gol, pero luego se produjo un controvertido contacto con Esteban Pavez, quien terminó introduciendo el balón con la mano.
A pesar de la euforia de los 30 mil hinchas albos, el árbitro detuvo la celebración y solicitó la intervención del VAR, donde los jueces Juan Lara, Manuel Marín y Benjamín Saravia debieron analizar la jugada en detalle. La tensión se trasladó no solo al estadio, sino también a la cabina del VAR, donde los jueces no lograban ponerse de acuerdo sobre la decisión.
Tras varios minutos de análisis y discusión, se concluyó que el gol debía ser anulado por mano de Pavez, generando aún más controversia entre los presentes. Incluso se llegó a discutir la posibilidad de un penal, que también fue revisado y descartado.
La situación evidenció la complejidad y la importancia de la tecnología en el arbitraje del fútbol actual, así como la presión a la que se enfrentan los árbitros y jueces del VAR en momentos cruciales de los encuentros.