La experiencia de Arturo Vidal en Flamengo tuvo un desenlace menos favorable de lo esperado. A pesar de su entrada triunfal al equipo de Río de Janeiro, el mediocampista chileno no logró mantener su posición destacada a medida que pasaban los meses, viéndose finalmente relegado al banco de suplentes.
La llegada del entrenador Jorge Sampaoli al Mengao generó esperanzas entre los aficionados de que Vidal pudiera tener un papel más destacado en el equipo brasileño. Sin embargo, estas expectativas no se concretaron y la relación entre el jugador y el entrenador se desgastó con el tiempo.
«Experimenté un entrenador que no lograba buenos resultados, y que no sabía obtener reconocer el valor de sus jugadores», declaró Vidal al compartir sus impresiones después de unirse al Atlético Paranaense.
Finalmente, Vidal se enfatizó que «experimentó una leve pérdida de control, aunque él nunca se mostró directo en sus acciones. Siendo en Chile, eso era diferente, ya que las decisiones recaían en parte en mí y en algunos colegas cercanos. No obstante, en mi etapa en Flamengo, la dinámica es distinta».